Clara Peeters está considerada una pionera en la pintura de bodegones, ya que es la única mujer de la que se tiene constancia que se especializara en ese tipo de pintura en los Países Bajos en la primera década del siglo XVII.
La documentación y detalles sobre su biografía son escasos. Se sabe que fue bautizada en Amberes en 1594 y que se casó en ésa misma ciudad en 1639. Respecto a su fallecimiento, tampoco hay datos concretos ya que, según las fuentes, habría muerto entre 1621 y 1657. Consulta aquí la nota biográfica que ofrece el Museo del Prado.
La primera obra que se le atribuye está fechada en 1607, se trata de un bodegón en el que se representan a pequeña escala diversos alimentos y utensilios cotidianos. Es notable la maestría plasmada en esa obra, máxime si tenemos en cuenta que su edad debía rondar los 14 años. Como era de esperar, tampoco hay información documental que aporte datos sobre su educación artística, aunque en aquella época el acceso a las escuelas de arte también estaba cerrado a las mujeres. Se piensa que podría haber sido alumna de Osias Beert, famoso pintor de bodegones de Amberes, pero tampoco se han encontrado registros de esta relación.
Hay un desconocimiento casi absoluto de esta figura clave de la pintura del siglo XVII, a la que se le atribuyen solamente alrededor de 40 obras fechadas entre 1607 y 1621. Sus obras se encuentran distribuidas por numerosos museos y colecciones particulares; el Museo del Prado en Madrid tiene cuatro de ellas en su exposición permanente.
«En los siglos XVI y XVII pocas mujeres pudieron dedicarse a la pintura de manera profesional. La mayoría de ellas eran hijas de pintores, bajo cuya órbita se formarían. Desconocemos si ese es el caso de Clara Peeters. En cualquier caso, tenían prohibido el dibujo anatómico, que generalmente se hacía a través del estudio del natural de modelos masculinos desnudos, lo que condicionaba su aprendizaje. Por ese motivo, muchas de esas mujeres pintoras se especializaron en la pintura de bodegones.» (Fuente: Museo del Prado)
Las obras de Clara Peeters presentan objetos valiosos como copas, monedas y flores exóticas, así como frutas, nueces, dulces y alimentos en general. Se le atribuye la introducción en la pintura holandesa de bodegones los ingredientes de una comida sencilla y cotidiana, siendo de las primeras en presentar distintos tipos de pescados como piezas principales de la obra. Sus pinturas evocan la presencia humana a través de frutas o alimentos cortados o parcialmente comidos. En varias de sus obras se puede encontrar lo que parece ser su autorretrato a modo de reflejo en alguno de los elementos de la composición; podría decirse que fue ella quien introdujo esa ‘moda’ ya que muchos pintores de la época comenzaron a incluir también su autorretrato en sus obras de forma más o menos evidente.
Exposición «El arte de Clara Peeters»
Entre octubre de 2016 y febrero de 2017, el Museo del Prado de Madrid le dedicó una exposición a Clara Peeters, siendo la primera dedicada a una pintora en sus casi 200 años de historia. En este vídeo de 5 minutos, Alejandro Vergara, Jefe de Conservación de Pintura Flamenca y Escuelas del Norte, comenta la exposición «El arte de Clara Peeters«.
Clara Peeters, una historia en imágenes
El Museo del Prado de Madrid ofrece este interesante recurso interactivo (pulsa en la imagen) sobre la obra de Clara Peeters. A medida que se avanza en el contenido se ofrecen datos adicionales sobre su obra pulsando en el símbolo [ ].
